sábado, 12 de marzo de 2011

Olas Bajo Las Sábanas


Con mi cuerpo hambriento
nado en los poros de tu piel
cómplice y sedienta,
para no huir de tu sombra menuda
rumbo al faro de tu orgasmo
que es un grito convulsionado,
intimo;
una noche entera que navega
en la luna valdiviana;
una gota en tu mar apasionado,
que es un oleaje tembloroso
que golpea mi pecho tempestuoso.
En ella abro las ventanas
de tu respiro entrecortado
para ser dos olas
bajo las sábanas,
un temporal en tu sudor,
un mordisco del tiempo
en tu tiempo.
Para alimentarme del bramido
de tus mareas,
del vendaval de tu mirada,
para amanecer como un náufrago
adherido a tu cuerpo de coral,
para nacer de nuevo en el
calor de tus manos.